El hotel era la base perfecta para explorar la costa, con impresionantes acantilados, playas de arena y mares cristalinos. ¡La aventura en bicicleta y senderismo fue genial! Además, la casa era preciosa y tenía zonas comunes fabulosas para pasar el rato. Definitivamente, volvería por más diversión con amigos.

Lo único que podríamos haber pedido para una diversión aún mejor, sería tener una zona de fiesta en el hotel donde los jóvenes como nosotros pudiéramos bailar y disfrutar de la música en grupo.

¡Excelente! Todo muy acogedor y bonito. A menos de 5 minutos del centro. La cama y las almohadas eran muy cómodas. Estaba limpio y la dueña fue encantadora en todo momento. Lo recomiendo al 100%.

Insisto, este lugar es super recomendado.

El desayuno parecía excelente, desafortunadamente tenía prisa. El personal fue servicial y muy atento y me hizo sentir como en casa. Un servicio excelente a menos de 25 km del aeropuerto.

Ubicado en el centro de Kinsale, este B&B es el punto de partida perfecto para explorar la impresionante costa de Irlanda y el hermoso paisaje montañoso de County Kerry. Durante mi estancia, pude disfrutar de las vistas espectaculares desde el cercano James Fort, que ofrecía una mezcla perfecta de paisaje marino y paisajes montañosos. Además, el B&B se encuentra a poca distancia de la oficina de turismo, donde pude obtener guías informativas sobre lugares de interés cercanos, como el castillo de Blarney y la destilería Jameson. En definitiva, este lugar ofrece una ubicación privilegiada para aquellos que desean explorar la salvaje costa atlántica de Irlanda.

Espacios de almacenamiento limitados.

Ubicación: el hotel estaba lo suficientemente cerca de los restaurantes y del centro y del puerto. Además, estaba en un barrio tranquilo. La cama era grande, el baño bueno y había café, un salón y un hervidor de agua en la habitación. Los desayunos a precios razonables.

El hotel boutique es encantador con detalles delicados y personalizados, desde la ropa de cama de calidad hasta las colonias repartidas por todo el hotel. La anfitriona, Carmel, es estupenda y muy cariñosa. El museo en el hotel es una mezcla decorativa de detalles antiguos y modernos. La ubicación es perfecta, a solo unos minutos a pie del centro de Kinsale, un pueblecito de cuento.

Me sentí bien atendido, no me puedo quejar.

Una estancia encantadora en un hotel boutique con habitaciones únicas y personalizadas. La dueña, Carmel, es una artista muy cariñosa y atenta. La ubicación es perfecta, a solo unos minutos a pie del centro de este maravilloso pueblecito. La decoración de la casa es impecable y las zonas comunes son fabulosas. El personal nos recibió amablemente y la habitación estaba muy limpia. Además, nos sorprendió encontrar zumo de naranja, té, café y bollería en la habitación.

No tengo ninguna queja sobre nuestra estancia en este hotel boutique. 😊

Todos los miembros del personal son muy atentos.

Está realmente cerca del aeropuerto de Cork, a solo 25 minutos en coche.

Acogedor y bonito

Cama cómoda y almohadas. Limpio y cuidado.- Atención encantadora de la dueña.- Detalles delicados y especiales.- Decoración cuidada y fabulosa.- Chico encantador que hablaba español.- Ubicación perfecta en el centro

Nada negativo.

Siempre vuelvo a este hotel en Kinsale porque tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis en las habitaciones, estacionamiento cercano, almacenamiento de equipaje, comedor al aire libre, área de picnic. Además, la primera vez que me alojé aquí, el personal me ayudó a recuperar mis pertenencias olvidadas. ¡Volveré para unas vacaciones!

Preciosa decoración y zonas comunes fabulosas. Habitación muy limpia y cuidada.- Atención encantadora del personal.- Buena ubicación, a dos minutos del centro del pueblo.

No hubo nada que no me gustase.

Excelente! Hotel boutique con habitaciones personalizadas, amenities de calidad y toallas bordadas. La dueña Carmel es amable y cariñosa, te brinda información sobre Kinsale. Ubicación perfecta, a minutos del centro. Recomendado al 100%. 😊

Este hotel boutique ofrece atención personalizada y detalles delicados que te hacen sentir especial. Cada habitación es única y está cuidadosamente decorada con amenidades de marcas de alta calidad. Además, la ubicación es inmejorable, a poca distancia del centro de la ciudad en una colina.

No hubo ningún aspecto negativo, todo estuvo perfecto.

La estancia en este hotel boutique fue simplemente encantadora. La atención de la dueña, Carmel, fue excepcional y nos hizo sentir especiales desde el momento en que llegamos. La decoración del lugar es hermosa, con detalles tanto antiguos como modernos que se mezclan de manera decorativa y delicada. Las habitaciones, todas distintas, estaban impecables y la cama era muy cómoda. Además, la ubicación es perfecta, ya que en menos de 5 minutos se llega al centro de esta pintoresca localidad.

Todo fue genial 😊